A la derecha del Grandhotel Praha, justo al lado del Templo de Týn, se extiende Ungelt o Corral de Týn. Un lugar pintoresco, cuyo carácter le llevará a usted unos siglos atrás.
Este corral de mercaderes originalmente era más bien un fortín separado de la ciudad por una zanja y muralla. Su mayor auge lo experimentó durante el gobierno de Carlos IV. Servía para proteger a los mercaderes y su mercancía. Había allí un almacén de la mercancía, establos para caballos, alojamiento para los mercaderes y hasta uno de los hospitales más antiguos de Praga.
La palabra Ungelt - tasa, es de origen alemán y se relaciona con el pago del arancel por mercaderes extranjeros. El corral estaba bajo la protección del rey y bajo su propio reglamento. Mercaderes que sólo atravesaban Praga tenían que quedarse allí tres días y primero ofrecer su mercancía a los mercaderes praguenses. Tan sólo después podían seguir su camino. Una prueba de que el mercado era un cruce verdadero de comerciantes de todas las partes de Europa son hallazgos arqueológicos, entre ellos también monedas de Grecia y Persia.
Por las noches se tomaba y se hacían cuentos de los viajes. Igual que con cada monumento de Praga, también con Ungelt se relaciona una leyenda. Según ella, al corral llegó un turco bonito y rico para alojarse en la posada. Se enamoró de la hija del tabernero y le propuso el matrimonio. Sin embargo, la hija del tabernero no quiso abandonar Praga. El turco tuvo que volver a su país para cumplir sus compromisos. Pasó el tiempo y la muchacha se casó con otro hombre, pues creía que el turco estaba muerto. Sin embargo, éste regresó y mató a la muchacha. Dicen que hasta ahora se le ve caminando por Ungelt con su cabeza cortada debajo del brazo.
Más tarde, en una de las cafeterías locales se reunían personalidades importantes de la historia checa como František Palacký o Josef Kajetán Tyl. Actualmente, el centro medieval del mercado se ha convertido en un centro histórico y cultural. Encontrará allí un teatro, galería, tiendas y restaurante.
Gracias al Grandhotel Praha y su cercanía a los monumentos más importantes de la Praga Vieja, incluido el Corral de Týn, en un momento Vd. puede admirar este lugar antiguo con sus propios ojos.